Reestructuración. El Gobierno argentino pretende avanzar en un esquema de Instituto Tecnológico que favorezca el ingreso de productos importados al mercado nacional sin interponer trabas en los procesos de certificación exigidos por las normativas vigentes.
En medio de un conflicto con los gremios por el despido de 258 trabajadores a los que ayer finalmente no se reincorporó, las autoridades del Instituto Nacional de Tecnología Industrial preparan el lanzamiento de un master plan con vistas a colocar el know how del organismo al servicio de una «relación de cooperación bilateral con los países de la Unión Europea», contribuyendo a facilitar el ingreso de productos importados «sin las exigencias normativas» cuyo cumplimiento supervisaba hasta ahora el INTI. El diseño del proyecto cuenta con el asesoramiento de Tecnalia, una corporación internacional con antecedentes sobrados en la materia, ya que fue clave en la transformación de los laboratorios públicos del país vasco en un instituto de cooperación público-privado, adecuado a las normativas que exigía la Unión Europea para permitir el ingreso de España en el bloque comercial del continente.
«Para avanzar en la reestructuración prevista, es necesario resolver primero la situación del personal cuyo desempeño ha quedado en la mira tras los relevamientos realizados», confiaron a Ámbito Financiero fuentes del ministerio de Producción.
A pesar de las intenciones componedoras declamadas oficialmente, los representantes sindicales recibieron una negativa cerrada a la demanda de reincorporar a los cesanteados. En el encuentro -realizado ayer en el ministerio de Modernización- los dirigentes de ATE propusieron, como única condición para continuar con el diálogo, la inmediata reincorporación de los despedidos; mientras que las autoridades del INTI ratificaron el compromiso de diálogo y la revisión de los casos, pero sin ningún tipo de condicionamientos. De este modo, las negociaciones continuaron empantanadas.
El plan para quitarle al Instituto la potestad de monopolizar los ensayos tecnológicos efectuados a los productos que pretenden ingresar al mercado argentino, dio sus primeros pasos en noviembre del año pasado cuando el gobierno presentó una serie de medidas para «agilizar trámites» y «ahorrar costos» en la administración pública. Así, promulgó los Decretos 891 y 894 por los que estableció nuevas prácticas en materia de simplificación y reglamentó procedimientos administrativos, entre los que se destaca el cambio en la metrología legal, quitándole al INTI la exclusividad para la realización de ensayos y permitiendo la participación de otros laboratorios, tanto públicos como privados. Desde Modernización admitieron que hay entre cinco y diez laboratorios interesados en tener contratos con el Estado para realizar tareas de certificación y homologación.
Master Plan a la medida
El power point de presentación -al que accedió este diario- está fechado en enero de 2018 y tiene en su encabezado los membretes del INTI y de Tecnalia, además de la leyenda «borrador de trabajo FASE 3». Entre los puntos destacados del texto, se consigna que el organismo «debe ser un actor clave para acelerar la incorporación de tecnología e innovación en la industria argentina con el objetivo de ser competitivos a nivel internacional» y colaborar en «la implantación de compañías foráneas» y en el «intercambio de procesos industriales con otros países». Oficialmente admiten la existencia de «una alianza estratégica con la corporación vasca para lograr que el INTI tenga un sector fuerte y desarrollado en I+D (innovación y desarrollo), colaborando en la implementación de capacidades en robótica, energías, sector automotriz, en las capacidades de vender desarrollos tecnológicos, hacer seguimiento de proyectos y generar startups de base tecnológica». Tecnalia tiene relación directa con el gobierno, de quien recibe millonarias subvenciones del gobierno vasco, «suficientes para mantener a un alto número de funcionarios en altos cargos, cuya función específica no ha sido claramente identificada», sostiene un comunicado de la central sindical vasca, en curiosa coincidencia con lo que plantean los gremialistas argentinos respecto a la gestión de Javier Ibáñez en el INTI
En este contexto, no es casual que sea una empresa mixta de origen español la encargada de preparar el terreno para lo que se viene, ya que el gobierno de Mauricio Macri tiene previsto profundizar los vínculos con el gobierno de Mariano Rajoy, que llegará a la Argentina en abril. El viaje del ministro Nicolás Dujovne previsto para esta semana, tendrá como principal escala España, «garante de nuestro país ante la Unión Europea, promoviendo sus posiciones y las del Mercosur en las negociaciones comerciales», al decir de un reconocido analista ibérico.
Fuente: Ambito.com