Luego de que se diera a conocer la balanza comercial negativa con Brasil y los patentamientos de vehículos en junio con alto componente de ese país, el Gobierno planea convocar, en las próximas semanas, a algunas de las automotrices para que bajen las compras al país vecino, entre otros ejes de la discusión sectorial.
Fuentes gubernamentales señalaron ayer a BAE Negocios que «gran parte de la culpa del ‘rojo’ que tenemos en la balanza comercial son los autos brasileños y aunque se vendan muy bien en el mercado local y las concesionarias estén felices, habrá que importar menos».
Una clara señal para las terminales que se abastecen de Brasil y que tendrán que presentar planes de compensación de importaciones, por los abusos que se cometieron desde diciembre del 2015. El Ejecutivo quiere, según las fuentes, que las compañías que están en falta sigan el camino adoptado por Renault, que desde este mes tomará 700 operarios para producir en mayor volumen localmente y recortará las importaciones desde Brasil.
Con Renault a la cabeza, las automotrices deben avanzar en planes de reprogramación productiva. La marca francesa pareció haber tomado nota del reto gubernamental y anunció que desde julio sumará 700 operarios en la planta de Santa Isabel. El plan es importar menos los modelos Sandero, Logan y Stepway desde Brasil y aumentar las exportaciones de Fluence y Kangoo, los modelos que se producen en la provincia mediterránea.
Fuentes del sector afirmaron ayer que las terminales ingresarán en un proceso de reprogramación de la producción, exportación e importaciones para cumplir con el planteo formulado por el secretario de Industria, Martín Etchegoyen.
El planteo oficial, anticipado por BAE Negocios el pasado 2 de junio, se dio en medio de una tensa reunión donde el secretario de Industria, Martín Etchegoyen, fue quien tomó la palabra y exigió que el Flex sea de tan sólo 1,26 dólar hasta el 2020. Esto es, que durante los próximos dos años y medio, las automotrices podrán comprar vehículos de Brasil por 1,26 dólar por cada dólar que exporten a ese país.
Caso contrario, el Gobierno podrá ejecutar garantías que deberán ofrecer las terminales por el monto que corresponda, de acuerdo al desvío de la meta comercial. El Ministerio de Producción emitió un comunicado hace días en el que expresa que adoptará medidas para garantizar el cumplimiento del Flex (acuerdo de 5 años que establece una pauta de importaciones y exportaciones) acordado con Brasil en junio del año pasado.
Fuente: Bae negocios