Un informe de M&R Asociados reflejó que, a pesar de el saldo comercial positivo observado en los últimos meses, «no existen demasiados motivos para optimismo» ya que la cifra escondió un comportamiento poco deseable para la actividad económica. En ese sentido, planteó la necesidad de dedicar esfuerzos a incrementar las exportaciones con mayor valor agregado.
«Existen vectores clave como los agroalimentos, energía y minería, servicios basados en el conocimiento y la economía creativa (audiovisual, software, diseño, etc.) que representarán oportunidades concretas para pensar en un salto exportador de calidad, que no solo asegure mayor flujo de divisas genuinas sino también permite movilizar recursos e inversiones internas y del exterior en todo el territorio», sostuvieron desde la consultora.
Para el corto plazo, el estudio publicado este miércoles proyectó que el Gobierno va a tratar de mantener la balanza comercial positiva, combinando el cepo, las microdevaluaciones y las restricciones a la importación, pero marcó también la urgencia de pensar una dinámica exportadora de mediano plazo, que tendrá que ser acompañada por una habilitación a la compra de insumos desde el exterior.
La pérdida de dinamismo de las exportaciones se percibió en la caída de las ventas de manufacturas, fundamentalmente las de origen industrial (MOI), que se desplomaron hasta un 45,9% interanual en junio. Según el informe, la participación de las MOI sobre el total de las exportaciones tocó su nivel más bajo desde los 90.
El mes pasado arrojó un superávit comercial de casi u$s1.500 millones. Sin embargo, estuvo impulsado por exportaciones de productos con bajo valor agregado, como los porotos de soja y los granos de maíz, cuyos envíos treparon un 60% respecto a junio de 2019, y por el derrumbe de las importaciones, que ya acumulan 22 meses consecutivos con bajas.
Según lo desarrollado por M&R, el saldo comercial medido en doce meses móviles, registró un crecimiento del 170%, acumulando un total de u$s18.440 millones. «Macroeconómicamente esto es vital e imprescindible para aguantar el actual estrés sobre el mercado cambiario, ya que es la única vía por la que se generan divisas para alimentar la oferta en el MULC», resaltaron, aunque advirtieron que una recuperación de la economía requerirá de un aumento de las importaciones y una diversificación de las ventas al exterior.
Fuente: Ambito