Los controles afectaron a las importaciones de consumo.

Los controles afectaron a las importaciones de consumo.
En octubre se sostuvo el superávit comercial, que trepó a USD1.601 millones. Al respecto cabe una aclaración fundamental: estos números son los declarados en Aduana y habrá que ver cuánto de esto se volcó efectivamente en pagos en el mercado cambiario y cuánto se quedó en especulación y coberturas frente a una posible devaluación, dato que se conocerá el viernes. Las proyecciones no son muy positivas ya que el BCRA solo logró acumular compras de divisas por USD207 millones en el mes. Las importaciones cedieron un poco, en el marco de los mayores controles oficiales, aunque eso no afecto demasiado a la destinadas a la inversión.
En ese sentido, tal como mostraron los números publicados por el Indec a través del informe del Intercambio Comercial Argentino (ICA) de octubre, las importaciones cayeron 5,5% en la comparación desestacionalizada con septiembre. Hubo, en cambio, una mejora de 31% respecto a octubre del 2020 e incluso un crecimiento de 27,3% contra el mismo mes del 2019. Ambas comparaciones son contra momentos muy bajos, ya que eran períodos fuertemente recesivos, en un caso por las devaluaciones con las que cerró Cambiemos su gestión y en el otro por la pandemia.
Pero la cosa muestra ciertas diferencias al mirar qué importaciones traccionaron la caída mensual. Y para eso sirve mirar cuáles crecieron más y cuáles menos en la comparación interanual. Así, al contrastar con octubre del 2020, se observa que las que perdieron más dinámica fueron las de consumo. Las que tienen impacto en la producción local, en cambio, es decir aquellas que se usan para producir, mantuvieron números relativamente altos. No es que no hubo impacto de los controles que arrancaron en octubre, sino que fueron menores en las importaciones de inversión.
Por caso, la importación de maquinarias aumentó 24,9% respecto a octubre del 2020 (había crecido 35% en septiembre); la de insumos creció 33,5% (había sido 54,6%) y la de piezas y accesorios de las maquinarias trepó 33,6% (había sido 51,2%). En cambio, los bienes de consumo crecieron solo 13% (había sido 20,1%) y los vehículos de pasajeros cayeron 43,8% (había sido de 36% la baja en septiembre). Es decir, hubo una baja general en las importaciones pero las que menos dinámica mostraron fueron las de consumo.
El superávit comercial, en lo que va del 2021, alcanzó los USD13.940 millones. Se trata del nivel más alto en los últimos 11 años. Supera al 2010 y queda por debajo de los USD14.472 millones del 2009. Sin embargo, la dificultad creciente en los últimos meses, debido a la brecha cambiaria, es que eso se vuelque en superávit comercial del MULC. Es decir: los dólares efectivamente ingresados y egresados del mercado cambiario. Y es que la expectativa de devaluación invita a los exportadores a minimizar liquidaciones y a los importadores a adelantar pagos.
Desde la consultora Abeceb destacaron: “Si bien aún no se cuenta con los datos del MULC correspondientes al mes de octubre, la dinámica que se evidenció en los meses previos y las ventas netas de divisas del BCRA en el décimo mes del año reflejan que el incremento del saldo comercial superavitario no tuvo como contrapartida una dinámica similar en el MULC”.
Y agregaron: “Podemos inferir que las recurrentes regulaciones del gobierno y la falta de señales económicas y políticas claras incentiva a los agentes a aumentar la demanda de dólares y reducir su oferta, lo que termina opacando cualquier tipo de noticia positiva que puede surgir por parte del comercio exterior”.
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Fuente: Bae Negocios