Importaciones: Aduana suma controles informáticos para combatir abuso con cautelares y triangulaciones.
Dólar que entra, dólar que va a la producción, repiten en el gabinete económico. Para reforzar esa línea que impulsa el ministro de Economía Sergio Massa, fuentes oficiales le confirmaron a Ámbito que la Aduana sumó controles informáticos que están dirigidos a combatir el uso abusivo de medidas cautelares y triangulaciones irregulares para importar mercadería. A partir de ahora, el importador que se encuentre en el listado de empresas que presentaron múltiples amparos recibirá un mensaje indicando que se encuentra “bajo monitoreo”. También se deberá señalar específicamente la dirección del depósito a donde va la mercadería. Además, pedirán informar si el país de procedencia de la mercadería es distinto al de facturación.
Las nuevas medidas se dan en el marco de la intensificación de controles que el Gobierno viene impulsando sobre las importaciones para priorizar el uso de divisas hacia el sector productivo. El organismo de control viene detectando maniobras de sobrefacturación de importaciones, subfacturación de exportaciones y el presunto “alquiler” de medidas cautelares para traer mercadería del exterior.
Sobre este último punto sospechan que una serie de empresas presentan pedidos para que el Estado las autorice a importar a cotización oficial e inician varios procesos judiciales. Luego, vía otra empresa, ceden la marca por un mes para poder importar esa mercadería usando la medida cautelar.
A partir de las irregularidades detectadas, la Aduana tomó una serie de medidas que incluyen controles informáticos que generarán un alerta para la intervención de las áreas de control y fiscalización impositivas y aduaneras. Al momento de efectuar la declaración SIMI en sistema, el importador que se encuentre en el listado de empresas que presentaron medidas cautelares recibirá un mensaje indicando que se encuentra bajo “monitoreo por presunto uso abusivo”.
En el mismo sentido, se apunta a prevenir la sobrefacturación con operaciones trianguladas. Por lo que al momento de la declaración se emitirá un mensaje al importador solicitando que informe si el país de procedencia de la mercadería es distinto al país de facturación. En ambos casos, las alertas a las áreas de fiscalización impositiva y aduanera se dispararán de manera inmediata. En caso de optar por la opción que indica que el país de origen es el mismo que el de facturación, se constatará dicha información mediante un control ex post a cargo del área de Valoración de la Aduana.
Anteriormente, el organismo que conduce Guillermo Michel había determinado la obligatoriedad de declarar la dirección del depósito donde conducirán la mercadería para aquellas empresas que presentaron múltiples cautelares. Lo hicieron luego de una serie de fiscalizaciones en donde no encontraron rastros de los productos importados por la vía judicial ni tampoco la justificación de venta.
En declaraciones formuladas a este diario semanas atrás, Michel explicó que con este tipo de acciones apuntan también a generar una “fuerte percepción de riesgo”. De esta manera, buscan corregir las conductas a futuro. En una reciente reunión del gabinete económico, el funcionario exhibió un documento que refleja una caída del 17% en la cantidad de empresas que hacen operaciones trianguladas, que si bien es una práctica habitual del comercio exterior, se detectó que en algunos casos puntuales se estaba utilizando para hacer un rulo sobrefacturando la mercadería ingresada al país.
Fuente: Ámbito