Alternativas frente al cierre de las importaciones

Las trabas a la importación dieron vuelta algunas pólizas. Ante un siniestro, los seguros de hogar y automotor tradicionales se enfrentan a un problema: buena parte de lo que tienen que reponer pasa por la Aduana. Por ello, muchas firmas están agregando especificaciones para los elementos importados que puedan contener electrodomésticos, equipos electrónicos, maquinarias y autos.
La valuación de activos es la forma de adaptarse a la coyuntura que encontraron muchos. La idea es afinar al máximo la valorización de los bienes asegurados al momento de redactar las pólizas. «Es un concepto que tomó importancia en épocas como ésta, en las que hay fluctuaciones en el valor de la moneda», explica Leandro Canosa, gerente Técnico de la empresa de brokers Gaman.
Cambio de época
La mayoría de los equipos y bienes sofisticados vienen del exterior. lncluso, los de fabricación local tienen piezas y materiales importados. El eje está en valuar de modo correcto para que el asegurado no tenga problemas ante un potencial siniestro.
Un modo es el de devolver el monto que costaría comprar los bienes dañados por un siniestro pero no reponerlos para evitar enfrentarse a las trabas de importados. QBE La Buenos Aires incluye en su cobertura hogar la reposición del valor de los bienes que estuvieran dentro de la casa ante un incendio o la caída de un rayo que dañara, por caso, los electrodomésticos, siempre dentro del límite de la suma asegurada.
La póliza Más, de Mapfre, también opta por el valor de reposición. Ante un incendio, robo o un accidente doméstico, la compañía devuelve el valor de reposición del mobiliario. La cobertura no requiere un inventario previo de lo que hay dentro de la casa. Se pone una suma límite y la reposición se hace hasta ese valor.
Sancor lanzó recientemente, dentro de su seguro combinado familiar, un servicio técnico para aparatos electromecánicos y equipos electrónicos. También, ofrece una póliza similar para maquinaria agrícola que protege contra incendio, avería o robo. Excluye a los equipos de riego. «Para evitar gastos extras, las pólizas prevén que el asegurador no abonará el mayor costo de las piezas o recambios importados cuando haya partes de fabricación local, hechas bajo patente y que cumplan con idénticas especificaciones de las piezas o equipo dañado», dice Canosa.
Las dificultades en reparar electrodomésticos y productos electrónicos ante la falta de piezas importadas abrió el juego a las cadenas de retail. Las tiendas cobran un extra sobre el valor de lista del producto y garantizan su reparación o la reposición de un artículo similar si no se consiguen los repuestos. En general, el extra se calcula en un porcentaje que ronda en promedio un 20% del valor del artículo. «Es un servicio muy contratado, sobre todo en productos importados como impresoras y consolas. La gente sabe que si se le rompe cualquier elemento electrónico no lo va a poder reponer. Hasta recomendamos estoquearse de cartuchos de impresión por la cantidad de contenedores retenidos en la aduana», aseguran desde una cadena de electrodomésticos.
Casi todas las cadenas de retail brindan garantías extendidas asociadas a un player del mercado asegurador, en general, un banco, encargado de gestionar la reparación, como si fuera cualquier otra póliza del rubro hogar. El extra comienza a correr cuando se acaba la garantía estándar. Ante el siniestro, la aseguradora deriva a un servicio técnico oficial. En caso de que la reparación incluya algún elemento importado, la póliza brinda un plazo de tres meses para conseguirlo. Vencido, no devuelve el total del precio del electrodoméstico, sino un porcentaje menor (cerca del 80%) de un producto nuevo similar.
Las garantías extendidas son pólizas estándar. Canosa recomienda elegir productos personalizados sobre todo en equipos de trabajo de los que no es posible prescindir demasiado tiempo. «En relación a los componentes y los equipos que no tuvieran su símil en el país, es clave solicitar la inclusión dentro de la cláusula de reposición los costos de los bienes asegurados, incluyendo gastos de importación, montaje y puesta en marcha de bienes nuevos con la misma tecnología que los bienes a asegurar. Esta es la herramienta principal por la cual se puede garantizar que el asegurado recomponga su situación patrimonial ante la ocurrencia de un siniestro que afecte estos bienes».

Fuente: Cronista